Salsa de tomate picante: Añade un poco de chile o guindilla para darle un toque picante a tu salsa de tomate.
Salsa tártara de aguacate: Incorpora trozos de aguacate a la salsa tártara para una versión más cremosa y fresca.
Salsa bechamel con queso: Añade queso rallado a la salsa bechamel para hacer una deliciosa salsa de queso perfecta para pastas.
Preguntas frecuentes:
¿Puedo usar tomates en conserva para la salsa de tomate? Sí, si no tienes tomates frescos, los tomates en conserva son una excelente opción. Asegúrate de elegir los de buena calidad para obtener el mejor sabor.
¿Es necesario usar mantequilla para la bechamel? La mantequilla es esencial para una bechamel clásica, pero si prefieres una versión más ligera, puedes sustituirla por aceite de oliva.
¿Cómo puedo hacer que las salsas sean más espesas? Si deseas una salsa más espesa, puedes cocinarla a fuego lento por más tiempo o añadir más harina en la bechamel.
¡Esperamos que disfrutes de estas salsas caseras y las uses para realzar tus platos favoritos!
