Introducción
La spanakopita es uno de los platos más emblemáticos de la gastronomía griega. Este delicioso pastel de espinacas y queso, envuelto en capas crujientes de masa filo, es perfecto para cualquier ocasión: desde una comida ligera hasta una fiesta de aperitivos. Su sabor fresco, combinado con el toque salado del queso feta y el aroma de las hierbas, la convierte en una receta irresistible tanto para los amantes de las verduras como para los que buscan probar nuevos sabores internacionales. ¡Te sorprenderá lo fácil que es prepararla!
Ingredientes:
500 g de espinacas frescas (también puedes usar espinacas congeladas)
200 g de queso feta desmenuzado
1 cebolla mediana picada
2 dientes de ajo picados
2 huevos batidos
100 g de queso ricotta (opcional, para mayor cremosidad)
1 cucharada de aceite de oliva
1 cucharadita de eneldo seco (o fresco si prefieres)
Sal y pimienta al gusto
12-14 hojas de masa filo
50 g de mantequilla derretida (o aceite de oliva)
1 cucharada de jugo de limón (opcional, para dar un toque fresco)
Instrucciones:
Preparar las espinacas: Si usas espinacas frescas, lávalas bien y córtalas en trozos pequeños. En una sartén grande, calienta una cucharada de aceite de oliva a fuego medio y saltea la cebolla y el ajo hasta que estén suaves. Agrega las espinacas poco a poco y cocina hasta que se marchiten y suelten toda su agua. Deja enfriar un poco y escurre el exceso de líquido.
Mezclar los ingredientes del relleno: En un bol grande, combina las espinacas cocidas y enfriadas, el queso feta desmenuzado, los huevos batidos, el queso ricotta (si lo usas), el eneldo, la sal y la pimienta. Mezcla bien hasta que todos los ingredientes estén integrados.
Preparar la masa filo: Precalienta el horno a 180°C (350°F). Unte una bandeja para hornear con un poco de mantequilla derretida. Coloca una hoja de masa filo en la bandeja, pintándola con más mantequilla derretida. Repite este proceso con 6-7 hojas, asegurándote de que cada capa esté bien enmantecada. Esto le dará al pastel una textura crujiente y dorada.
Agregar el relleno: Extiende el relleno de espinacas de manera uniforme sobre las capas de masa filo. Luego, cubre el relleno con el resto de las hojas de masa filo, siguiendo el mismo procedimiento de enmantecar cada capa.
Hornear: Cierra los bordes de la masa para sellar el pastel y, si lo deseas, puedes cortar la masa sobrante para darle una forma más ordenada. Pinta la parte superior del pastel con un poco más de mantequilla y hornea durante unos 30-40 minutos o hasta que la masa esté dorada y crujiente.
Servir: Deja enfriar durante unos minutos antes de cortar en porciones y servir.
Consejos para servir y almacenar:
Servir: La spanakopita se puede servir tanto caliente como a temperatura ambiente. Es ideal para acompañar una ensalada fresca o disfrutarla como un aperitivo en reuniones.
Almacenar: Si te sobra pastel, guárdalo en un recipiente hermético en el refrigerador. Se mantendrá bien durante 2-3 días. También puedes congelar las porciones sobrantes, envolviéndolas bien en plástico y luego en papel de aluminio, para mantener su frescura. Descongélalas en el refrigerador antes de recalentarlas.
Variantes:
