Introducción
Las castañas de café son un dulce tradicional, con un toque único gracias al sabor intenso del café. Perfectas para ocasiones especiales o como un capricho en cualquier momento del día, estas pequeñas delicias están hechas con un suave y esponjoso relleno que combina perfectamente con la textura crujiente de la masa frita. Si eres fanático del café y los postres caseros, ¡estas castañas de café seguramente te conquistarán!
Ingredientes:
250 g de harina de trigo
1 huevo
50 g de mantequilla
100 ml de café expreso fuerte (preparado)
75 g de azúcar
1 cucharadita de levadura en polvo
1 pizca de sal
Azúcar glas para espolvorear
Aceite vegetal para freír
Instrucciones:
Preparar la masa
En un bol grande, mezcla la harina con la levadura en polvo y una pizca de sal. Agrega el azúcar, la mantequilla blanda y el huevo. Empieza a mezclar con las manos o una espátula hasta integrar todos los ingredientes. Luego, añade el café expreso preparado y sigue amasando hasta obtener una masa homogénea y suave. Si es necesario, añade un poco más de harina para darle la consistencia correcta.
Formar las castañas
Toma pequeñas porciones de masa y forma bolitas del tamaño de una nuez (aproximadamente 2-3 cm de diámetro). Puedes hacerlas ligeramente alargadas si lo prefieres, para simular la forma de una castaña más auténtica.
Freír las castañas
En una sartén profunda, calienta el aceite vegetal a fuego medio-alto. Una vez que el aceite esté bien caliente (unos 170-180°C), comienza a freír las castañas en pequeñas tandas. Fría cada bola durante 2-3 minutos, hasta que estén doradas y crujientes por fuera. Asegúrate de girarlas para que se cocinen de manera uniforme.
Escurrir y espolvorear
Saca las castañas fritas del aceite y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa. Mientras aún están calientes, espolvorea con azúcar glas al gusto.
Consejos para servir y almacenar:
Servir: Las castañas de café son perfectas para acompañar un café o un té por la tarde. También puedes servirlas como postre después de una comida especial. Su sabor a café las convierte en una excelente opción para los amantes de este ingrediente.
Almacenar: Puedes almacenar las castañas de café en un recipiente hermético a temperatura ambiente. Se mantendrán frescas y crujientes durante 2-3 días. Si deseas que mantengan su frescura por más tiempo, guarda el recipiente en un lugar fresco y seco.
Variantes: